Si que hace tiempo que no publico, y es que no me entusiasma hacer entradas como esta empezando a escribir sin saber que voy a contar, aunque si es cierto que una vez comienzo a divagar la cosa suele concretarse. Puede hacerlo de miles de maneras distintas, y nunca todas en el mismo instante,, como si tiro de cuerda y rasca la oreja de un elefante que comía salsa,, pues si, aunque no los solemos pensar, eses pensamientos están ahí esperando el fuerte soplido que descubra de polvo su ignorado ser.
Ranas y sapos saltan en charcos,
gacelas hirviendo suman sabiendo,
orejas despistadas son maltratadas,
y los hilos de cobre vuelven al sobre.
Como decía, esas palabras que acabo de escribir producto de un fugaz pensamiento serían otras totalmente distintas si no fuesen como son, ya que al ser así imposibilitan que sean como no son. Tampoco me quiero extender complicando mi expresión tanto como pueda como muchas veces acostumbro a hacer, mas bien por que me gusta enrevesarme, complicar las cosas, y hacer algo simple de manera complicada, aunque sepa como hacerlo simple,, y es que al complicar lo simple se aprende lo complicado.
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